Queridas todas,
Bien sabido es que con esto de la cris**, nos vemos obligadas a devanarnos los sesos para tener el aspecto y el estilo de vida que toda señorita merece. En definitiva: a ser apañadas (que de esto va este blog, aunque a veces me disperse) para salir indemnes y glamourosas de un país que, como Dios, cuando aprieta ahoga pero bien .
No seré yo la que corte sus alas en pos del espíritu cenizo que nos invade. Por eso, mujer, hoy le ofrezco diez planes que la harán sentirse como la reina del Saba por menos de 15 euros.
Que sí, que si quieren, pueden. Aunque estén en el paro o su empresa no les haya pagado las últimas cinco nóminas.
Le dedico este post con especial cariño a Ana Mato, creadora de la frase más pija de España («Mi momento favorito del día es ver cómo visten a mis hijos») y fanática del confeti. Va por ti Anita, que lo bueno nos gusta a todas.
Que los disfruten, amores.
-Tómese un cóctel en el Dry Bar de Javier de las Muelas (Gran Hotel Meliá Fénix)
Madrid tiene esa cosa encantadora de sorprenderte cuando menos te lo esperas con un rinconcito que parece de todo menos madrileño. Tal es es el caso de este Micro-Principado de Mónaco ubicado en la Plaza de Colón. Entre hordas de erasmus borrachas y skaters quinceañeros se alza una bonita terraza con hilo musical de los 60s y un bar de cócteles que logra combinar el rancior con lo fashion y salir indemne.
Hablamos de la coctelería Dry Bar del Hotel Gran Meliá Fénix. Un local a la par canalla y glamouroso donde se sentirá como una reina, porque lo es. Camareros encantadores que te llaman de usted y ese ambiente morboso como de estar en transición que tienen todos los hoteles. Algún famosete, también.
Cócteles buenérrimos por 15 euros.
-Cervecita en la terraza del Hotel Ritz
Otro rincón secreto en los aledaños de la Castellana. De antiguo esplendor y detalles algo cursis, la decadencia de este hotel me fascina. Sentadica en un jardín con fuentes, cisnes de piedra y vegetación, podrá cotillear los vestidos de las invitadas a algún casamiento. Tal vez hasta se encuentren a Paquita Ors, señora fascinante que tiene una suite en la casa desde hace años. El jardín es romántico como un poema de Becquer, con una escalinata de mármol, un pianista y vistas a los salones con lámparas de araña. No lo han oído aquí, pero si quiere un recuerdo de uno de los lugares de más rancio abolengo de la capital, los posavasos son una monada.
Cerveza a 15 €
-Cómprese algo en Colette
Lo sé: usted quisiera comprarse el último it-bag del diseñador fetiche de turno en el templo del diseño francés. Sin embargo, le voy a ofrecer una interesante alternativa para que pueda pasear por la Rue St. Honoré con una bolsita de Colette sin tener que llamar a Cofidis. En la planta baja de esta boutique venden artículos de papelería, discos y accesorios low cost que se supone que son lo más.
Como estas pulseritas de Mono&Me por unos 15 €. Son monas y le recordarán que una vez estuvo allí. ¿Más barato todavía? Una cucada de bloc de notas adhesivas en forma de cámara por 8 €.
-Regálese un pintalabios de firma
Dicen que en épocas de cris** se disparan la venta de pintalabios. Y es que el maquillaje es una alternativa económica y sencilla para sentirnos automáticamente más guapas y preparadas para comernos el mundo. Y si es de firma, será como llevar un pedacito de haute couture dentro del bolso.
-Clase de brikam yoga
No sé si esto se puede considerar un plan sublime, porque la clase en sí es una tortura. Practicado por chifladas como Lady Gaga o Gwynett Paltrow, es un deporte de alto rendimiento que consiste en 26 posturas o asanas en una clase climatizada a 42 grados. Sé que suena fatal, pero si soporta los 90 minutos de achicharre saldrá de clase feliz como una perdiz, habrá eliminado todas las toxinas de su cuerpo a través del sudor y tendrá la piel reluciente como una manzana transgénica. Además, podrá presumir con las amigas de haber practicado la disciplina de moda entre las celebrities, ahí es ná.
Una semana ilimtada de Brikam Yoga en Madrid o Barcelona por 15 €.
-Revista hipster
Pase por un kiosko trendy o por el VIPS y cómprese algún magazine de prestigio como Love, I-D, Dazed&Confused o Nylon. Que tenga una portada bien chula y sea de grosor contundente. Leála en la intimidad del hogar con luz tenue. Se sentirá una superenterada en moda, practicará inglés, pillará ideas y, como dirían los amigos de Postureo, queda genial para decorar el salón.
A partir de 10 € aproximadamente.
-Libro y café
Algunas editoriales como Anagrama tienen ediciones de bolsillo de grandes novelas a partir de 7 euros. Compre una en un café-librería como Tipos Infames o La Central y pídase un café para acompañar la lectura. Se sentirá como una joven parisina de Mayo del 68 y habrá invertido en culturizarse. Además, igual se liga a ese lánguido guaperas de barba del fondo. Y si no, al menos habrá pasado un buen rato y demostrado lo independiente que es usted.
Desde 7 euros.
-Flores frescas
Sé que puede parecer una tontería, pero tener flores frescas en casa me parece un gran lujo, que además una disfruta durante días. Desde unas sencillas margaritas a unas cuantas peonías, no hay nada más alegre y chic. Busque una floristería cercana a su domicilio y hágalo habitualmente. Es una buena costumbre, que dice mucho de usted.
Ramos de margaritas desde 5 €.
-Taza de Mr. Wonderful
El estudio de diseño de moda en Internet (auténtico boom en las redes sociales) es propiedad de una pareja de Barcelona que lo está petando con sus diseños naif y frases buenrollistas. Apoyar a gente que tiene iniciativa y talento me parece casi un deber moral. Usted puede tener la tacita de moda por el presupuesto asignado.
Tazas con diseños variados 15 €.
Un sistema con el que podrá probar productos de belleza premium en envase pequeño (no miniaturas). Cremas, perfumes, productos para el pelo, tratamientos corporales… enviados a domicilio en una monada de packaging.
La suscripción mensual cuesta 15 euros, y no tiene compromiso de permanencia. Una buena forma de acceder a la alta cosmética sin dejarse un dineral. Además, los envíos se personalizan en función del tipo de piel, gustos y preferencias de la consumidora.